Tu MacBook es, con toda probabilidad, uno de los mejores portátiles del mundo. Es rápido, tiene unas funcionalidades excelentes y un diseño espectacular. Sin embargo, es importante saber cómo llevar a cabo su cuidado y mantenimiento con el objetivo de alargar su vida útil. Al fin y al cabo, es una herramienta importante para ti y su precio, lo vale.
Debes de tener en cuenta un tema fundamental: optimizar su rendimiento interno. Ya que al irse actualizando sus sistemas operativos, se demandan más recursos por lo que un mantenimiento en condiciones te ayudará a disfrutar de tu MacBook sin dificultades.
La importancia de un mantenimiento regular
Uno de los factores que más perjudica el deterioro progresivo de un MacBook es el ir acumulando archivos temporales, diferentes residuos y todas esas aplicaciones que rara vez utilizamos. y aplicaciones en segundo plano. Si no realizas limpiezas periódicas deberías.
Una de las mejores opciones es CleanMyMac un limpiador para Mac que en cuestión de segundos te quita archivos que ya no son necesarios y, por ende, te ayudan a tener un dispositivo con más espacio libre.
Es de vital importancia, actualizar el software de forma periódica. Y es que, las versiones más recientes incluyen además parches de seguridad y mejoras para su rendimiento con lo que evitarás problemas futuros. Recuerda: ten siempre instalada la última versión compatible.
Dale un cariño extra a la batería
Sin una batería en condiciones, tu MacBook puede fallar. Es cuestión de tiempo. Es imprescindible evitar ciclos de carga que no aportan nada, que tu MacBook siempre está conectado y calibrar la batería. De hecho, macOs dispone de herramientas de gestión de baterías para ver cómo está la tuya y aplicar de este modo los ajustes necesarios.
En lo referente al almacenamiento, el disco siempre debe de disponer de espacio libre para no tener problemas en el uso de Mac porque al llenarse, como es lógico, su rendimiento baja considerablemente.
Para ello, haz copias de seguridad periódicas y opta por soluciones en la nube para guardar todo aquello que necesites.
La ventilación y la temperatura deben ser las adecuadas
A veces, solemos dejar de lado un aspecto tan importante como es la propia temperatura del MacBook. Y es que, cuanto más uso, más se va a sobrecalentar. Intenta, por ejemplo, no darle uso sobre superficies acolchadas o en espacios sin ventilación porque puedes quedarte un día sin Mac.
Úsalo sobre superficies limpias, revisa el polvo acumulado y si puedes trabajar al lado de una ventana mucho mejor para que esté a una mejor temperatura. Todo detalle cuenta para prolongar la vida útil de tu MacBook. Recuerda que el calor y la extrema humedad son enemigos de componentes como la placa base o el propio ventilador.
Cosas que haces en tu día a día
También hay pequeños gestos que pueden ayudar a que tu MacBook goce de una mejor “salud”. Por ejemplo, no lo sobrecargues de ventanas abiertas que no usas, no lo reinicies con frecuencia y apágalo bien, cierra aplicaciones que no usas, liberar memoria y almacenamiento cada semana y úsalo con mimo, ¡se lo merece!
Por supuesto, usa un firewall de confianza, evita descargar archivos de sitios poco confiables y usa contraseñas seguras para evitar ciberataques. Recuerda, ¡no dejan de crecer! La seguridad empieza siempre por uno mismo y tu MacBook es más vulnerable de lo que piensas. ¡Toma nota!